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Hiromi Kawakami - El cielo es azul, la tierra blanca

Quizás no habría estado tan mal hacerse ilusiones.

Ésta fue la primera novela de Hiromi Kawakami que desembarcó en España (de la mano, cómo no, de Acantilado) pero a mí esta autora japonesa ya me había enamorado con la siguiente que se publicó, Algo que brilla como el mar. El estilo limpio y accesible de su prosa hace que conectes enseguida con las historias cotidianas de las que habla Kawakami. Historias de amor y aprendizaje, siempre jugando con contrastes: ciudad anónima o naturaleza salvaje, vida en sociedad o vida al margen de las convenciones sociales.


"Si el amor es pequeño, deja que se marchite hasta que muera", piensa Tsukiko, la protagonista de El cielo es azul, la tierra blanca. Con casi cuarenta años, cree disfrutar de su soledad y su vida rutinaria: cuando no está trabajando, pasea, lee, se va de compras, visita bares y restaurantes. No luchó por retener ninguna de sus relaciones porque no consideró que merecieran la pena.

El reencuentro con su antiguo maestro de japonés la marcará. Entre los dos se establece un sutil acercamiento, siempre conscientes de los más de 30 años que los separan. Él la instruye sobre temas mundanos (las setas, el karma, los haikus...) y la invita a apreciar esos pequeños placeres de la vida. Tsukiko, por primera vez, echa de menos tener a alguien con quien compartir todo eso. Entenderá que su único enemigo es el tiempo.

Construida a base de breves momentos, momentos que rememora Tsukiko de cada uno de sus encuentros con el maestro, de eso trata realmente la novela, más allá de la historia de amor: de disfrutar cada momento como si fuera el último. De ser feliz degustando el menú del día en un restaurante humilde, visitando una exposición de caligrafía, relajándose en un balneario, organizando un picnic bajo los cerezos en flor o cocinando pulpo.


Ayuda mucho el estilo de Kawakami: muy poético pero sin descripciones excesivas, sencillo sin dejar de ser sugerente. La autora dibuja para sus personajes un mundo tan cotidiano como mágico en el que nos va atrapando sin que nos demos cuenta. Y así, la historia avanza sin sobresaltos hasta que descubrimos qué contenía el maletín del maestro.

Para leer este libro hay que tener muy presentes las contradicciones del Japón actual: un país que se esfuerza en ser moderno pero aún conserva costumbres ancestrales y rígidos códigos de conducta. Quien vaya a escandalizarse porque al maestro le molesta que una mujer le sirva el sake con pulso tembloroso, no captará que en realidad estos personajes son víctimas de esas circunstancias. Claro que les gustaría vivir en un mundo donde no tuvieran que encontrarse por casualidad y fingir que apenas se conocen, pero al mismo tiempo que aceptan esas reglas de la sociedad en la que viven, intentan por todos los medios ser felices. Descubren que es posible no nadar contracorriente ni dejarse arrastrar: también es posible disfrutar del viaje.


Me sorprendió estar rodeada de tantas criaturas vivas. En la ciudad siempre estaba sola, aunque estuviera con el maestro. Creía que en las ciudades sólo vivían criaturas de gran tamaño. Sin embargo, al reflexionar sobre el asunto me di cuenta de que en la ciudad también estaba rodeada de seres vivos. Nunca estábamos solos. Aunque en la taberna sólo hablara con el maestro, Satoru también estaba allí, así como una multitud de clientes habituales cuyas caras me resultaban familiares. Aun así, nunca había considerado a las demás personas de carne y hueso. No había caído en la cuenta de que cada uno de ellos tenía su propia vida, llena de altibajos como la mía.

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9 comentarios:

David dijo...

Interesante, le daré una oportunidad a esta autora. ¿Recomiendas empezar por este o el otro que mencionas? No he visto reseña a "Algo que brilla como el mar", pero igual es porque no he sabido encontrarla...

Alex Pler dijo...

No hay reseña de "Algo que brilla con el mar" porque lo leí antes de retomar el blog... Quizá la escriba un día de estos, porque el libro lo merece. Con cualquiera de los dos conocerás bien la forma de escribir de la autora, pero personalmente a mí me gustó mucho más "Algo que brilla con el mar", supongo que me identifiqué más con esos niños.

cosas de bara dijo...

Hola Lleonard,
A este libro ya le había echado el ojo, así que, tu buena reseña me anima a su lectura, lo pongo a la cola, este año caerá.

Saludos,
Bara

Alex Pler dijo...

Gracias por el comentario, Bara... Estos días estoy con maratón de literatura japonesa, ya iré subiendo las críticas. :D

aoi dijo...

Konnichi wa!
Yo os recomiendo "Algo que brilla como el mar". Con él disfruté del despertar a la madurez de . Vale la pena.
Respecto a las dualidades, totalmente deacuerdo, pero también comentar que los personajes no son planos, sino que interactuan y evolucionan... Se tratan otros temas como las relaciones paterno-filiales, la confianza, la homosexualidad, el amor, el sexo... muy muy interesante como comenté en:
http://niponcafe.blogspot.com/2011/04/kawakami-hiromi-aquello-que-brilla-como.html
http://niponcafe.blogspot.com/2011/04/claves-de-interpretacion-de-algo-que.html
http://niponcafe.blogspot.com/2011/04/claves-de-interpretacion-de-algo-que_25.html
También me gustaría profundizar más en esta autora y prometo leer "El cielo es azul, la tierra es blanca". Y gracias a tu exposición miraré de buscar la novela para las vacaciones de verano. Tras leerlo, me paso para comentar.
Felicidades por tu blog!!! ^_^

David dijo...

Acabo de leer "La bailarina" de Ogai Mori, recién editado por Impedimenta. ¡Muy recomendable! Además incluye una introducción bien escrita e informativa, cosa que me ha sorprendido. Normalmente dejo este tipo de introducciones para el final, porque prefiero hacerlo una vez leída la historia. A veces, estas introducciones dan por hecho que ya sabes de qué va tanto la historia como el autor, de ahí que las deje para el final, con algo de bagaje adquirido. Esta sin embargo está muy bien, muy instructiva y concisa. Ayuda a mejorar la experiencia de lectura de la novela, que pese a corta, es intensa.

Alex Pler dijo...

Aoi, gracias por los enlaces a tu blog, tienes entradas muy interesantes. A mí también me gustó más "Algo que brilla como el mar".

David, acabo de recibir "La bailarina" en mi tienda, por lo que dices merece la pena, ya le echaré un vistazo. Además, fue una novela del mismo autor, "El ganso salvaje", el libro que me llevó a retomar el blog.

http://sombrasdeneon.blogspot.com/2011/01/el-ganso-salvaje.html

David dijo...

Sí, recuerdo tu reseña. Cuando vi "La bailarina" en la librería y leí el autor, me sonaba de algo pero no sabía muy bien de qué... al rato caí en que seguramente lo leí en tu blog y recordé la reseña de "el ganso salvaje", obra que aún no he leído pero ya he anotado en mi lista!

Alex Pler dijo...

Cómo me gusta que se acuerden de mi blog para estas cosas. Espero tu comentario de "El ganso salvaje"; el libro de "La bailarina" es cortito así que pronto lo reseñaré por aquí.

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