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I ja no val saber-ho tot

"El azar siempre responde a una razón que se nos oculta."
(Vicente Haya)

Así que era esto. Cuando todas las piezas encajan y ves el puzzle completo, es lo que piensas. Qué fácil era. Pensabas que la vida te decía "no" y sólo te decía "espera". Pero no te entrenaron para ser paciente, te entrenaron para exigir resultados inmediatos, las cosas claras, todo lo demás significará que el árbol se ha torcido.


Hace una semana, quería escaparme a Madrid, pero también quería tener suerte y que me tocasen unas entradas para el festival Primavera Sound de Barcelona. Ni una cosa ni otra: no hubo suerte y encima me tocó trabajar el sábado, así que nada de viajes. Y me hundí, claro, porque no entendía nada. Yo sólo quería pasarlo bien...

Así que fui a trabajar, y a última hora de la tarde, entró por sorpresa una amiga hablándome de Beginners. Tuve un buen pálpito. Segundos después, me llamaba un amigo. Que me había conseguido dos entradas para el Primavera. Tanto agobio para acabar disfrutando de una de las mejores noches del año, y ha habido muchas.

Conciertazos de Saint Etienne y Justice, cerveza gratis, brisa, mirador al mar, y sobre todo la compañía de ese chico al que últimamente siempre le digo que está muy guapo, porque lo está. Nos mirábamos y no quería estar en otro lugar. Comprendí que por eso tuve que trabajar, para no irme a Madrid y poder aprovechar ese regalo.


Pero antes tenía que aprender que los regalos no se fuerzan, aparecen. Sé que no es fácil cambiar los malos hábitos por la efervescencia de cada momento presente. Pero merece la pena. Montar los puzzles sin caja, sin referencias. Por colores, por contornos, por intuiciones. Sean 1000 o 2000 piezas, tardes más o menos, al final todas las piezas encajan. Confía en la vida y sus sorpresas, son más sabias.

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8 comentarios:

Dan dijo...

No sabía yo todo esto!! Mira, todo pasa por algo, está más que claro. Lo bueno, lo malo. Lo que sí es seguro es que a las buenas personas, ya sea ahora o más adelante, le tiene que venir lo bueno y sin parar ;)
Te lo mereces!!

Ander dijo...

Como dicen los cubanos: "Lo que sucede conviene..." y si lo dicen ellos...en fin, a disfrutar de esos pequeños regalos siempre tan bienvenidos. Un abrazo y como siempre un placer leerte.

Alex Pler dijo...

No tenía prisa, bien lo sabes, Dan... pero mira, al final la lluvia trajo cosas buenas :)

Ander, esa frase ya me la habías dejado por aquí alguna vez ¿verdad? Qué cierta es...

OM RCastro dijo...

Hace tiempo pensé que mi vida es como un tetris: con piezas de colores distintos que tengo que ir encajando lo mejor que sé, según van cayendo (y eso que ya entré en los 40 y tantos...; me sonreía el otro día cuando leía en este blog comentarios sobre entrar en la década de los 30...; pues yo estoy mejor ahora que a los 20, el doble de mejor, justamente.

Un abrazo,

Oscar

Alex Pler dijo...

Mmmm, me gusta también la metáfora del Tetris, sí. ¿Las líneas completadas son los años? Espero poder decir lo mismo que tú cuando llegue a los 40, pero ahora déjame regodearme en el "drama" de los 30 jajaja. ;)

OM RCastro dijo...

Las líneas completadas son los años mentales, las líneas sin más son los años cronológicos (jajaja). No te digo cuántas tengo completas; de las otras, 42.

Un abrazo,

Oscar

NoChu dijo...

Desde ahora mismo me declaro mega fan de la frase que encabeza esta entrada. Describe tan bien esta filosofía de vida que me estoy forjando que no creo que nadie lo haya definido mejor hasta ahora. Encaja a la perfección con aquella reflexión que compartiste hace unas semanas sobre las sorpresas que te puedes encontrar al torcer de forma inesperada en un camino. Al fin y al cabo la certidumbre no es garantía de nada, solo un seguro de tranquilidad mal entendida. Muchas cosas solo se entienden a posteriori y con lo empedernidamente optimista que soy quiero que el azar juegue conmigo para que me haga descubrir cosas que hoy ni siquiera puedo imaginar. Qué placer leerte y poder disfrutar de ti. :)

Alex Pler dijo...

Gracias a ti por enseñarme, por corroborar. Por esas metáforas que sólo a ti se te ocurren y que tanto encajan. ¡Quiero chocolate belga! ;)

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